dimecres, 30 de gener del 2008

honestidad

Hoy he leído en La Vanguardia el suicidio de un banquero acojonado. Después de dos años de estafar un porrón de euros. Suicidio realizado tras darse cuenta que estaban a punto de pillarlo.
"Felizmente" casado y padre de dos hijos.
¿Felizmente? Dejadme dudarlo.
Vale, de acuerdo, vida regalada, dinero que ayuda a enmascarar desgracias más o menos nimias…
Y súmale el orgullo de lograr algo prohibido sin que nadie se percate y encima sacarle provecho al asunto. (si, si, inocentes del mundo, hay gente así)
¡que viva la honestidad!
No tendré jamás un porrón de euros (ni los conocimientos para poder estafarlos) a no ser que tenga suerte (cosa que dudo, ya que tampoco juego a la lotería).
Y… si, llegare a vieja, si dios o el destino o lo que sea quiere, con mis pequeños y grandes problemas cotidianos, mi família y mi honestidad.

dimarts, 29 de gener del 2008

vital

oportunitats
opcions
tries difícils
tries fàcils que resulten equivocades al cap dels anys
camins incontables que rauen en un únic sender
o disfrutes del paisatge que has cultivat i fet crèixer o no deixarás mai de plorar.

dimarts, 22 de gener del 2008

dilluns, 14 de gener del 2008

nadie

Mentiras, mentiras y más mentiras.
Resulta que tuvo suerte en la vida, dejó de ser un don Nadie hijo de un don Nadie cuándo don Nadie padre empezó a ganar dinero casi sin darse cuenta.
Don Nadie padre aún mantiene un poco de dignidad, pero a don Nadie hijo, el florecimiento económico le pilló en pleno apogeo hormonal. Resultado: un gallito prepotente suponemos que impotente. Con un lema: soy lo que tengo. Lema que deriva de manera lógica a: si tu no tienes nada, no eres nada.
Gente así presupongo que hay a montones, hasta hoy tengo suerte, no he conocido a Nadie.